He aquí uno de los productos (aunque por el momento sólo se trate de un concepto) que más me gusta, de uno de los diseñadores que más admiro. Pese a que no se trata de una super "stark", su trabajo es de una calidad indudable.
Lo que se aprecia en la imágen de cabecera no es, ni más ni menos, que una propuesta del diseñador "Adam Alpine" para DYSON... lo cierto es que esto último podía intuirse; ya que es indudable que ha sabido captar la esencia de la estética que la multinacional imprime a sus aspiradoras. El cacharro en cuestión es un concepto bastante curioso, ya que se trata de una especie de triciclo con capacidad para succionar el polvo de la casa a su paso... ¿no sería genial haber tenido uno de estos de pequeño?
Sin embargo, lo que más me gusta de este diseñador industrial es su manera de afrontar un proyecto de diseño; ya que, salvando las distancias, se parece mucho a la manera en que desarrollo los míos. Básicamente destacaría tres aspectos en su forma de llevar a cabo el proceso:
Comienza con una lluvia de bocetos (que por supuesto se han confeccionado con una tableta digitalizadora), los que aporto son sólo los de la propuesta definitiva, hasta llegar ahí bosquejó más de 100.
Sólo cuando tiene bien definido el volumen y las formas generales, comienza a modelar en 3D. El dominio con el que se desenvuelve dibujando es innegable, sin embargo el grado de foto-realismo que aporta la infografía hace que el producto acabe de entrar por los ojos.
Pero sin lugar a dudas, la diferencia está en los detalles de "producto acabado" que incorpora en su modelado: líneas de ensamblaje, tornillería, canaladuras, abertuas de ventilación, sedigrafías, cableado... todas esas cosas que muchos, en mayor o menor medida, pasamos por alto cuando estamos en la fase de prototipado 3D y que está claro que marcan la diferencia. Como a Víctor le gusta decir, es bueno mostrar al cliente un producto toalmente acabado ya que en ingeniería no debe dejarse nada a la imaginación.
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